POLÍTICA
“El País” de Uruguay publica un artículo sobre el genocidio de Jodyali
Bakú, 27 de febrero, AZERTAC
El 24 de febrero del 2020, en “El País”, uno de los diarios principales de Uruguay se ha difundido un artículo sobre genocidio de Jodyali, titulado “Jodyali: una tragedia que no se debe olvidar ni volver a repetir”, escrito por Isaac Gliksberg.
Según el artículo, Jodyali es uno de los catorce Distritos azerbaiyanos que entre el año 1991 y el 29 de octubre de 1993 fueron ocupados por Armenia, en el marco de la lamentable y dolorosa guerra relacionada con el territorio de Nagorno Karabaj. Jodyali fue ocupada el 26 de febrero de 1992 y lamentablemente permanece siendo ocupada.
El autor destaca que, en la noche del 25 de febrero de 1992, tropas del Ejército armenio ingresaron a territorio de Jodyali y generaron una matanza de civiles que, según organismos internacionales de Derechos Humanos como la "Human Rights Watch" y la organización "Memorial", aquella matanza de ciudadanos civiles inocentes fue la más grande ocurrida en una sola jornada.
Además, Isaac Gliksberg escribe que, en efecto, en la noche que va del 25 al 26 de febrero de 1992 fueron masacrados seiscientos trece ciudadanos civiles azerbaiyanos- entre ellos, 106 mujeres y 83 niños. Todos ellos, totalmente inocentes. Un millar de azerbaiyanos fueron hechos prisioneros en tanto que muchos ciudadanos azerbaiyanos, residentes permanentes de Jodyali, debieron emigrar y refugiarse en otras regiones de Azerbaiyán, desde donde aún hoy no han podido regresar a sus hogares en Jodyali.
El 22 de agosto de 2012, en el centro de la ciudad de México, se le otorgó el nombre de Jodyali a una plaza pública y se instaló un monumento recordatorio de tan trágico acontecimiento.
También se nota que el genocidio de Jodyali se enmarca en muchos otros ataques por tropas militares armenias, entre los cuales no podemos omitir el bombardeo y la ocupación el 23 de julio de 1993 de la ciudad azerbaiyana de Agdam, hoy denominada por muchos como la "Hiroshima Caucásica", tal el extremo de su destrucción física y demográfica.
Al finalizar el artículo, el autor expresó su deseo de todos los hombres y mujeres de buena voluntad, como la de los pueblos de ambas naciones vecinas en conflicto bélico, que el mismo culmine por la vía del diálogo, de conversaciones de entendimiento, y se logre una paz duradera.