Bakú, 17 de marzo, AZERTAC

Murtuza Mukhtarov es un industrial, inventor, figura pública y gran mecenas del arte. Nació en el pueblo de Amirjan, en Absheron. Como muchos otros millonarios de Bakú, empezó a trabajar desde un simple obrero hasta un magnate del petróleo. De joven, Mukhtarov trabajó como carretero, transportando petróleo de los campos petrolíferos en carros, y como palista, sacando petróleo de los pozos poco profundos a mano.

Inventor sin diploma

El dueño de uno de los campos, Martov, se fija en un joven hábil y trabajador. Le permite llegar al "corazón" del pozo: aparatos, máquinas, herramientas. Pronto Mukhtarov se convierte en capataz y se encarga de los talleres mecánicos del campo petrolífero. Unos años más tarde, el propietario le vendió su taller de equipos de perforación en Zabrat. Sin diploma ni formación adecuada, Mukhtarov se convirtió en un conocido ingeniero de equipos de perforación e inventor de la región. En 1895 creó una máquina modernizada para el método de perforación por percusión y recibió una patente estatal por ella. Llamó a este invento "sistema de perforación de Bakú". Era mucho más avanzada que otras máquinas similares y más tarde fue conocida con el nombre de "Mukhtarov" en todo el mundo. Se exportó a muchos países. Mukhtarov también tenía otros inventos. A finales del siglo XIX, Mukhtarov puso en funcionamiento una fábrica de equipos de perforación en Bibi-Heybat. Fue la primera empresa industrial productora de equipos petroleros en Rusia. Al mismo tiempo, Mukhtarov compró parcelas petrolíferas cerca de Bakú. Y las fuentes de petróleo que las marcaron lo convirtieron en uno de los hombres más ricos del mundo.

Generoso filántropo

Murtuza Mukhtarov era conocido como un generoso filántropo. Fue patrono de la escuela real de Bakú, del gimnasio femenino Temirkhan-Shura, miembro honorario de la sociedad para la difusión de la alfabetización y la información técnica entre los montañeros de la provincia de Terek, miembro honorario de la Sociedad Caritativa Musulmana de San Petersburgo y fundador de 40 becas para instituciones educativas especiales de nivel superior y secundario. Para ello, publicó el periódico "Tarakki" en Bakú. Construyó escuelas y mezquitas. Construyó un magnífico teatro dramático en Kislovodsk que sigue funcionando en la actualidad. En San Petersburgo, junto con Tagiyev, construyó una mezquita que ahora se llama Tatarskaya. Las cúpulas talladas de la mezquita están cubiertas de azulejos, que, a pesar de su respetable edad, siguen brillando con un intenso azul celeste. También construyó mezquitas en Amirjan y Vladikavkaz.

"Mezquita de Murtuza Mukhtarov"

La mezquita de su asentamiento natal, Amirjan, merece una mención aparte. No había ninguna mezquita grande en el pueblo, y los habitantes querían construir una desde hacía mucho tiempo. La construcción de la mezquita se inició en 1901, pero debido a las dificultades financieras se suspendió. La población acudió a un magnate del petróleo en busca de ayuda. Mukhtarov se hizo cargo de todos los costes de construcción. Finalmente, en 1908 se construyó la mezquita según el diseño del arquitecto Ziver bey Ahmedbekov. El día de la inauguración de la mezquita, el famoso imán del pueblo, Amirjan Abu Turab, subió al minbar de la mezquita y leyó el hutba (sermón).

En cuanto a la arquitectura de la mezquita de Amirjan, cabe destacar que está adornada con dos majestuosos minaretes de 47 metros de altura cada uno. La mezquita tiene dos entradas y una cúpula. La luz penetra a través de 16 ventanas en una amplia sala de oración. La mezquita está bellamente ornamentada en su interior. El círculo sobre el mihrab simboliza a Alá, las cuatro cúpulas representan a los profetas, los cuatro pilares representan los libros sagrados y las finas líneas que hay debajo representan a los doce imanes. En los lados derecho e izquierdo de la mezquita hay inscritos saludos a los profetas en árabe. El propio Murtuza Mukhtarov rezó en la mezquita. Hoy en día, esta mezquita es conocida popularmente como la "Mezquita de Murtuza Mukhtarov".

Tras la trágica muerte de Murtuza Mukhtarov, fue enterrado de nuevo en el patio de la mezquita. Tras la independencia de Murtuza Mukhtarov, se colocó sobre su tumba una lápida del artista Haji Eldar Mikayilzade. Los elementos que decoran la lápida incluyen surahs del Corán, una imagen de la propia mezquita, torres de petróleo y otros elementos.

Un Corán único hecho por encargo de Murtuza Mukhtarov

Murtuza Mukhtarov regaló a esta mezquita un Corán que se hizo por encargo suyo en Estambul durante la construcción de la mezquita. La fecha de producción del Corán es 1908. Ha pasado más de un siglo, pero este singular Corán sigue causando una impresión indeleble. El Sagrado Corán está bellamente pintado en escritura árabe, el texto está parcialmente ornamentado con dorado. El Corán está impreso en papel grueso. El color del papel, que es verde, también es muy bonito. Por desgracia, el color original se ha perdido un poco en el proceso de almacenamiento prolongado. Las dimensiones de este Corán único también son impresionantes: mide 70 cm de largo y 30 cm de ancho. El libro tiene un estuche grueso que se asemeja a una carpeta.

Durante la época soviética, en la que se luchaba activamente contra la religión, una mujer local escondía el Corán en su casa, por su cuenta y riesgo, y lo transmitía de generación en generación. Legó que el Corán sería devuelto a la mezquita cuando se abriera a los fieles. Tras la independencia de Azerbaiyán, el Corán volvió a la mezquita. Hoy se conserva cuidadosamente como monumento histórico.

El excepcional Corán tiene un valor social, histórico y cultural. Junto con lo anterior, es uno de los elementos patrimoniales importantes que dejó Murtuza Mukhtarov. La entrega a la mezquita de este Corán único atestigua una vez más la grandeza de la personalidad de Murtuza Mukhtarov, que tanto ama a su pueblo y a su tierra. Hoy es muy importante que todo el mundo conozca estos hechos poco conocidos de nuestra brillante y gran historia.