CULTURA
El próximo número de la revista IRS-Herencia cuenta la historia de Shusha
Moscú, 27 de julio, AZERTAC
El último número de la revista "IRS-Herencia" se publicó en Moscú.
Según AZERTAC, la revista se abre tradicionalmente con una columna del redactor jefe Musa Marjanli. En su artículo "¡Shusha es Azerbaiyán!", el redactor recuerda que el 8 de mayo se cumplieron 30 años de la ocupación de Shusha por Armenia. "Para los azerbaiyanos, Shusha es más que una ciudad; es un cierto símbolo de la espiritualidad azerbaiyana, el centro de la cultura azerbaiyana, es en cierto modo todo Azerbaiyán. Porque esta ciudad, pequeña para los estándares anteriores y actuales, ha producido nombres que constituyen la flor de la cultura azerbaiyana: la literatura, la música y otros ámbitos de la creatividad. Teniendo en cuenta lo anterior, no es difícil imaginar el duro golpe que supuso la ocupación de Shusha para todos los azerbaiyanos. No es casualidad que Shusha, al igual que la planta en flor endémica de los alrededores de la ciudad, simbolizara durante muchos años la añoranza del pueblo por su tierra ocupada, y la esperanza de que algún día le fuera devuelta, aunque esta esperanza pareciera muy lejana para muchos. También es natural y lógico que la liberación de Shusha ocupara un lugar especial en la campaña militar de 2020 y fuera su culminación, marcando una victoria para Azerbaiyán", señala el artículo.
El número contiene la primera parte del reportaje del periodista ruso Andrei Vasilyev, que comparte sus impresiones sobre Shusha, tal y como aparece tras la liberación de los 28 años de ocupación armenia.
El amplio tema del enfrentamiento entre el pueblo azerbaiyano y los nacionalistas armenios tiene varios aspectos. Algunos de ellos se analizan en una serie de artículos publicados por la revista IRS-Herencia. Tras el papel del individuo, del ejército y del Estado, se presenta en este número el análisis del papel del pueblo en estos acontecimientos. El autor proporciona los hechos históricos sobre cómo en los momentos críticos de la agitación política y la confusión la propia gente tomó la iniciativa de proteger su patria, expresó su posición respecto a los acontecimientos, ayudó a sus compatriotas, que fueron privados por la fuerza de sus hogares y propiedades. Este fue el caso tanto a principios del siglo pasado, como en tiempos más recientes, en el nuevo giro del problema de Karabaj, que acaba de terminar.
También se presenta al lector material sobre diversos aspectos del patrimonio histórico y cultural de Azerbaiyán.