SOCIEDAD
Hoy es el Día Mundial de Lucha contra la Desertificación y la Sequía
Bakú, 17 de junio, AZERTAC
La desertificación es "la degradación de la tierra en zonas áridas, semiáridas y subhúmedas secas resultantes de diversos factores, entre ellos el cambio climático y las actividades humanas". La degradación de la tierra en las tierras secas se define como la reducción o la pérdida de la productividad biológica o económica de las tierras secas. Un tercio de la superficie de la Tierra se está degradando, amenazando la salud y los medios de vida de más de 1.000 millones de personas.
Los bosques cubren el 30% de la superficie de la Tierra. No sólo proporcionan seguridad alimentaria y refugio, sino que también desempeñan un papel fundamental en la lucha contra el cambio climático, ayudando a preservar la diversidad biológica y son el hogar de los pueblos indígenas. Cada año se pierden 13 millones de hectáreas de bosques, y la persistente degradación de la tierra en las tierras secas ha dado lugar a una desertificación de 3.600 millones de hectáreas. La deforestación y la desertificación causadas por las actividades humanas y el cambio climático representan un obstáculo importante para el logro del desarrollo sostenible y tienen repercusiones negativas en la vida y los medios de subsistencia de millones de personas que luchan contra la pobreza.
Las tierras secas representan alrededor del 50 por ciento de las tierras cultivadas del mundo. Las tierras secas se caracterizan por sus bajas precipitaciones y sus altas tasas de evaporación. Ocupan más del 40% de la masa terrestre de la Tierra y proporcionan un hábitat para más de 2.000 millones de personas. Casi la mitad de las personas que viven en las tierras secas viven en la pobreza. La satisfacción de las necesidades básicas de estas personas depende en gran medida de su entorno. Los habitantes de las tierras secas, el 90% de los cuales viven en países en desarrollo, están a la zaga del resto de la población mundial en lo que respecta a los indicadores de riqueza y desarrollo.
Todos los años, el 17 de junio es el Día Mundial de Lucha contra la Desertificación y la Sequía.
Según AZERTAC, el Día Mundial fue establecido por la Asamblea General de la ONU el 30 de enero de 1995. La fecha de la celebración se eligió en relación con el aniversario de la aprobación de la Convención de las Naciones Unidas de Lucha contra la Desertificación el 17 de junio de 1994.
La Convención ordenó a los Estados que dedicaran las actividades del Día Mundial de Lucha contra la Desertificación y la Sequía a sensibilizar a la opinión pública sobre la necesidad de la cooperación internacional para luchar contra la desertificación y los efectos de la sequía, así como sobre el estado de la aplicación de la Convención de Lucha contra la Desertificación.
Además, la Asamblea General de las Naciones Unidas declaró el período de enero de 2010 a diciembre de 2020 como el Decenio de las Naciones Unidas para los Desiertos y la Lucha contra la Desertificación. Su objetivo es promover las actividades de protección de las tierras secas.
Los efectos de la desertificación y la sequía son la inseguridad alimentaria, el hambre y la pobreza. Las tensiones sociales, económicas y políticas asociadas pueden provocar conflictos, un mayor empobrecimiento y una mayor degradación de la tierra. El aumento de la desertificación en todo el mundo amenaza con poner en peligro a millones de pobres más que se ven obligados a encontrar nuevos hogares y medios de vida.
Uno de los objetivos de desarrollo sostenible de las Naciones Unidas (Objetivo 15) es proteger, restaurar y promover el uso sostenible de los ecosistemas terrestres, gestionar de forma sostenible los bosques, combatir la desertificación, detener e invertir la degradación de la tierra y detener la pérdida de biodiversidad.
Cabe señalar que uno de los principales objetivos del concepto de desarrollo "Azerbaiyán - 2020: una mirada al futuro" es lograr un desarrollo socioeconómico ambientalmente sostenible. En el futuro se seguirán adoptando las medidas necesarias para proteger la diversidad biológica, neutralizar los efectos negativos del complejo de combustible y energía en el medio ambiente, eliminar y proteger el mar y su zona acuática, restablecer las zonas verdes y proteger eficazmente los recursos existentes. A fin de gestionar eficazmente los recursos de tierras, se adoptarán medidas para prevenir los procesos de desertificación, rehabilitar las tierras que se han deteriorado como resultado de las actividades de las grandes instalaciones industriales y mineras, mejorar el sistema de utilización de las tierras aptas para la agricultura y aumentar la protección de las tierras contra la contaminación antropógeno.