Bakú, 17 de octubre, AZERTAC

Las organizaciones no gubernamentales (ONG) de Azerbaiyán han hecho un llamamiento al Secretario General de las Naciones Unidas, Antonio Guterres, y al Consejo de Seguridad exigiendo que se detenga y se castigue al Estado terrorista de Armenia, reporta AZERTAC.

Aprobado por las firmas de 531 ONG, el llamamiento reza: "Quisiéramos informarles de que alrededor de la 1 de la noche del 17 de octubre, Armenia volvió a atacar Gandjá, la segunda ciudad más grande de Azerbaiyán, disparando un misil balístico SCUD / Elbrus sobre el bloque densamente poblado de la ciudad, matando a 13 personas e hiriendo a más de 40. Entre los muertos y heridos había niños, mujeres y ancianos.

Es la tercera vez en las dos últimas semanas que la ciudad de Gandjá es objeto de un intenso fuego de cohetes de Armenia, y hasta ahora 27 civiles han muerto y más de 100 han resultado heridos.

El bombardeo de Gandjá, la ciudad de más de 500.000 habitantes situada lejos de la zona de conflicto, sin ninguna necesidad militar por parte de los dirigentes político-militares armenios, el uso deliberado e indiscriminado de poderosos misiles destructivos como los SCUD para matar a civiles inocentes se incluirá en los libros de historia como el crimen de guerra más sangriento cometido contra la humanidad en el siglo XXI.

No sólo este acto de barbarie, salvajismo y terrorismo cometido por Armenia a los ojos del mundo entero preocupa profundamente a la opinión pública azerbaiyana, sino que también está gravemente enfurecida y perturbada por el silencio demostrado ante la tragedia humana, el genocidio y los crímenes de guerra cometidos en Gandjá por el Consejo de Seguridad de las Naciones Unidas, que debe detener y castigar a los agresores en todo el mundo y que fue establecido con este fin por la comunidad mundial.

Está claro para todos que la orden de llevar a cabo una masacre deliberada y masiva de la población civil de Gandjá fue dada personalmente por el primer ministro de Armenia Nikol Pashinián y el ministro de Defensa David Tonoián, y esta orden se llevó a cabo de inmediato. Según la Carta de las Naciones Unidas, el derecho internacional y el derecho internacional humanitario, al menos Pashinián y Tonoián, que dieron la orden, y otros militares que ejecutaron esta orden deben ser declarados criminales de guerra y deben aplicarse los procedimientos del Consejo de Seguridad de las Naciones Unidas para arrestarlos y castigarlos inmediatamente.

Esta vez, si el Consejo de Seguridad de las Naciones Unidas vuelve a guardar silencio sobre el crimen cometido por Armenia, significará la plena protección de Armenia, el agresor y asesino de los niños, así como la justificación y la complicidad en los crímenes internacionales cometidos por ella. Y la historia no perdonará a nadie por esto.

Por lo tanto, nosotros, las ONG azerbaiyanas que firmamos este llamamiento, instamos al Consejo de Seguridad de las Naciones Unidas a que convoque urgentemente y condene enérgicamente los crímenes de lesa humanidad cometidos por Armenia y utilice su mandato para adoptar las medidas apropiadas a fin de castigar merecidamente al primer ministro Nikol Pashinián y al ministro de Defensa David Tonoián que ordenaron bombardear la ciudad de Gandjá, matando a un gran número de civiles".