Bakú, 4 de marzo, AZERTAC

El 3 de marzo continuó el juicio por causas penales contra varios ciudadanos de la República de Armenia, incluidos Arayik Harutyunyan, Arkady Ghukasyan, Bako Sahakyan, Davit Ishkhanyan, Davit Babayan, Lyova Mnatsakanyan, entre otros, acusados de cometer numerosos crímenes graves, como crímenes contra la paz y la humanidad, crímenes de guerra, genocidio, violación de las leyes de guerra, terrorismo, financiación del terrorismo, y otros delitos relacionados con la guerra de agresión y la toma o retención del poder por la fuerza.

La sesión judicial se celebró en el Tribunal Militar de Bakú, presidido por el juez Zeynal Agayev, y contó con la participación de los jueces Jamal Ramazanov y Anar Rzayev, así como la jueza de reserva Gunel Samedova. Durante la sesión, los acusados contaron con intérpretes y abogados de defensa. Además, asistieron algunos de los acusados, sus defensores, víctimas y sus representantes, así como los fiscales que defendieron la acusación estatal.

El presidente del tribunal, al iniciar el interrogatorio, invitó a los acusados a declarar sobre los cargos que se les imputan y a proporcionar detalles relevantes para un examen objetivo de la acusación.

En la vista, los acusados Lyova Mnatsakanyan, Arayik Harutyunyan, Eric Ghazaryan y Vasil Beglaryan prestaron testimonio libremente, informa AZERTAC.

Lyova Mnatsakanyan declaró que participó en el ejército regular armenio contra Azerbaiyán durante la guerra de 2020 y mencionó su involucramiento en los combates de abril de 2016. Confirmó que Armenia proporcionó armas al régimen de Nagorno-Karabaj, pero señaló que no estaba completamente al tanto de las operaciones debido a las restricciones impuestas por las autoridades armenias. “Participé en el ejército regular de Armenia en la guerra contra Azerbaiyán. Además no quiero hablar del contenido de la orden, es conocido por todos ustedes. En general, después de la desmovilización del servicio militar no estuve relacionado con el ejército. No quería hacerlo debido a circunstancias familiares y de otro tipo. Además, se nos prohibió establecer cualquier tipo de contacto con el ejército. En concreto, el primer ministro de la República de Armenia nos prohibió hablar con nadie, tener contacto con nadie” apuntó el y agregó: “No había necesidad de involucrarme en las operaciones de 2016. De lo contrario, por supuesto, habría participado. Teníamos muchas armas tácticas, de reconocimiento y dispositivos radioelectrónicos que también tenía Armenia, recibimos estas armas de Armenia. Por último, me gustaría decir que si el mando superior nos transfiere algo, deberíamos asignar personal para ello e implicar al personal”.

Arayik Harutyunyan, por su parte, explicó que, en junio de 2020, durante una reunión en Ereván, se discutió la situación militar y la preparación de Armenia para la guerra. Harutyunyan mencionó que Armenia no estaba preparada para un conflicto a gran escala debido a la falta de recursos, aunque subrayó que el potencial de Azerbaiyán era mucho mayor. También admitió que en el verano de 2020, durante su visita a la línea del frente en Karabaj, presenció las maniobras militares dirigidas por el jefe del Estado Mayor del ejército armenio, Onik Gasparyan, y que las decisiones de atacar en territorio azerbaiyano se tomaron en Armenia.“En junio de 2020, pedí a Pashinyan que nos familiarizara con el proceso de negociación. En junio de 2020, nuestra reunión conjunta del Consejo de Seguridad se celebró en Ereván. Fue una reunión abierta a todos. Durante la reunión, el entonces ministro de Asuntos Exteriores armenio nos familiarizó con el proceso de negociación. Estaba claro que el proceso había llegado a un punto muerto. En la sesión, los jefes de las estructuras de defensa de Armenia nos informaron sobre la situación del ejército. Quedó claro que Armenia no está preparada para la guerra. Se necesitan ciertos recursos para hacer la guerra. Así, se necesitan alimentos, armamento y recursos financieros. Resultó que Armenia no dispone de tales recursos. Allí expuse brevemente mi opinión. Dije que el resultado de la guerra dependerá de nuestros recursos, ya que cualquier guerra es una guerra de recursos. El potencial de Azerbaiyán era muchas veces superior al de Armenia, según todos los datos.

Luego, en julio, como saben, hubo tiroteos en Tovuz. Yo no tenía ni idea de lo que estaba pasando allí. Sólo sabía lo que mostraba la televisión. Era una persona nueva, así que tuve que familiarizarme con el «ejército» y saber lo que ocurría en la línea de contacto. En el verano de 2020, empecé a recorrer la línea del frente y a familiarizarme con el «ejército». Publiqué varios artículos en mi página de Facebook y en el «sitio web» de la dirección. Toda la información sobre el ejército nos la daba el servicio de prensa. Toda la información sobre el ejército nos la dio el servicio de prensa. Se publicaba en mi página. Sí, había discursos y declaraciones mías, de las que ahora me arrepiento”, indicó el.

“Las maniobras estaban dirigidas por el jefe del Estado Mayor del ejército armenio, Onik Gasparyan. No se trata de un proceso secreto, tuvo lugar ante los ojos de todos. A finales de verano, Nikol Pashinyan llegó a Karabaj. Le acompañé a las “formaciones del ejército”. Se familiarizó con la situación. Oí y vi lo que ocurría en las “fuerzas armadas”. No recibí ninguna información del “Comité de Defensa de Karabaj”. Nunca se me informó de la situación. No tenía ninguna autoridad relacionada con el “ejército”. Usted también lo sabe. También está escrito sobre ello en el acta de acusación. La prensa armenia también mencionó repetidamente a este respecto que Armenia era responsable de la seguridad de los armenios de Karabaj. Las fuerzas armadas de Armenia, el “Ejército de Defensa de Karabaj” también estaban incluidas allí. Así pues, Armenia es responsable de las cuestiones relacionadas con la seguridad”, enfatizó el.

Este juicio, que continúa en el Tribunal Militar de Bakú, está centrado en el enjuiciamiento de individuos acusados de crímenes de guerra y otras violaciones graves relacionadas con el conflicto en Nagorno-Karabaj.

El 27 de septiembre, como saben, comenzó una guerra a gran escala. Según las «leyes de Karabaj», teníamos que declarar la ley marcial, y así lo hicimos. El «parlamento» fue informado del inicio de la guerra. Comenzó el «reclutamiento» anunciado por la dirección del «ejército de Karabaj». Comprendí cuál sería el resultado. Desde los primeros días, hablé con Pashinyan sobre cuándo terminaría la guerra. Me reunía regularmente, podría decirse que a diario, con miembros del Parlamento. También me encontraba a diario con Bako Sahakyan y Arkady Ghukasyan. El tema central de nuestras conversaciones era cómo detener la guerra, al menos un minuto antes. El 2 de octubre, declaré que no tenía autoridad en el “ejército” y que me convenía estar en las filas de los soldados. Dejé mi puesto y mi oficina, y me fui al frente. Por supuesto, no podía estar en la primera línea debido a las operaciones militares en curso, pero conocí a los soldados en el frente. No quería regresar. Sabía lo que ocurriría. Sin embargo, ante la insistencia de colegas y amigos, regresé. Ese día se tomó la decisión de atacar instalaciones militares en lo más profundo del territorio azerbaiyano, como instalaciones de cohetes o artillería.

Araik Harutyunyan, uno de los principales acusados, continuó su testimonio, detallando más sobre la cadena de mando y las decisiones militares tomadas durante el conflicto. Explicó que la estructura de mando de las fuerzas armadas en la región de Karabaj se centraba principalmente en el jefe del Estado Mayor del Ejército de Defensa de Karabaj, Onik Gasparyan, quien, según Harutyunyan, tenía un control efectivo de las decisiones militares.Harutyunyan también relató que no estaba completamente al tanto de las decisiones tácticas y el uso de armas específicas, pero recordó una conversación con Gasparyan en la que se discutieron los objetivos estratégicos de la guerra. Según Harutyunyan, Gasparyan le explicó que los principales objetivos del ejército armenio eran destruir los aeropuertos de Azerbaiyán. Se mencionó que uno de los objetivos de estos ataques era crear la impresión de que los ataques provenían de Karabaj, lo cual fue una táctica empleada para desinformar y confundir a la comunidad internacional y a Azerbaiyán: “La vertical político-militar empezaba básicamente «desde el Jefe del Estado Mayor del Ejército de Defensa de Karabaj», de arriba hacia abajo. Entendí, por el reciente testimonio de Levon Mnatsakanyan, que la investigación sabía cuáles eran los poderes que se tenían y lo que se podía hacer. No sabía quién tenía qué autoridad, qué armas debían o no utilizarse, etc. Cuando pregunté a Onik Gasparyan si estas decisiones estaban justificadas, me dijo que sí, que nuestros objetivos principales eran los aeropuertos de Azerbaiyán, los cuales debíamos destruir. Se mencionó que era necesario crear esa impresión, hacer creer que esos ataques supuestamente procedían de Karabaj”.

Araik Harutyunyan declaró que quería escribir una carta al presidente de Azerbaiyán, Ilham Aliyev, pero el primer ministro armenio, Nikol Pashinyan, no se lo permitió:

“La noche del 18 de octubre, tuvimos nuestra última reunión con Bako Sahakyan y Arkady Ghukasyan. Llamé a Nikol Pashinyan y le dije que estaba dispuesto a escribir una carta al presidente de Azerbaiyán para poner fin a la guerra; Bako y Arkady, si era necesario, también se unirían a mí. La esencia de la carta era simplemente pedir el fin de la guerra. El contenido de la carta que escribimos a Pashinyan era el siguiente: detener la guerra en cualquier orden y declarar que este es el deseo de los residentes armenios, ya que no había una opinión unificada en Armenia. Por eso, dije que era necesario referirse a nosotros y detener la guerra. Estamos dispuestos a ser culpables, entre comillas, después, pero lo fundamental es salvar vidas humanas. Pashinyan celebró varias reuniones, se reunió con la oposición, podría decirse que se reunió con casi todo el mundo. Al final del día, el 19 de octubre, me llamó y me dijo que la guerra continuaba. No quiero entrar en detalles. Lo peor de todo es que la guerra continuaba».

Cabe señalar que, como resultado de la guerra de agresión desatada por el Estado armenio y la comunidad criminal creada bajo su dirección, con la participación directa e indirecta de Robert Sedraki Kocharyan, Serzh Azati Sargsyan, Vazgen Mikaeli Manukyan, Vazgen Zaveni Sarkisyan, Samvel Andraniki Babayan, Vitaly Mikaeli Balasanyan, Hayki Zori Balayan, Seyran Musheghi Ohanyan, Arshavir Surenovich Garamyan, quince personas de origen armenio están acusadas de llevar a cabo, en contra de las normas del derecho nacional e internacional, una agresión militar contra Azerbaiyán bajo la dirección y participación directas, basadas en instrucciones orales y escritas, con apoyo logístico y de personal, bajo un mando y control centralizados, así como bajo el estricto control de oficiales de alto rango de Armenia, sus fuerzas armadas y grupos armados ilegales.

Cabe destacar que las siguientes personas también están acusadas en virtud de diversos artículos del Código Penal de la República de Azerbaiyán, en relación con los períodos de su participación en actos delictivos: Harutyunyan Araik Vladimiri, Ghukasyan Arkady Arshaviri, Sahakyan Bako Saaki, Ishkhanyan David Rubeni, Manukyan David Azatini, Babayan David Klimi, Mnatsakanyan Levon Henrikovich, Beglaryan Vasily Ivani, Ghazaryan Eric Roberti, Allahverdiyan Davit Nelsoni, Stepanyan Gurgen Gomery, Balayan Levon Romiki, Babayan Madat Arakelovich, Martirosyan Garik Grigori, Pashayan Melikset Vladimiri.

Estas personas enfrentan acusaciones bajo varios artículos, que incluyen:

Artículo 100 (planificación, preparación, desencadenamiento o realización de una guerra de agresión),

Artículo 102 (ataque contra personas o instituciones que gozan de protección internacional),

Artículo 103 (genocidio),

Artículo 105 (destrucción de población),

Artículo 106 (esclavitud),

Artículo 107 (deportación o reasentamiento forzoso de población),

Artículo 109 (persecución),

Artículo 110 (detención forzosa de una persona),

Artículo 112 (privación de libertad en violación del derecho internacional),

Artículo 113 (uso de la tortura),

Artículo 114 (mercenarismo),

Artículo 115 (violación de las leyes y costumbres de la guerra),

Artículo 116 (violación del derecho internacional humanitario durante conflictos armados),

Artículo 118 (robo militar),

Artículo 120 (homicidio premeditado),

Artículo 192 (emprendimiento ilegal),

Artículo 214 (terrorismo),

Artículo 214-1 (financiación del terrorismo),

Artículo 218 (organización de una asociación delictiva u organización criminal),

Artículo 228 (adquisición, transferencia, venta, almacenamiento, transporte o porte ilegales de armas de fuego, sus componentes, municiones, explosivos y artefactos explosivos),

Artículo 270-1 (actos que ponen en peligro la seguridad aérea),

Artículo 277 (atentado contra la vida de una personalidad del Estado o de una personalidad pública),

Artículo 278 (toma del poder por la fuerza o mantenimiento del poder por la fuerza, alteración por la fuerza del orden constitucional del Estado),

Artículo 279 (creación de formaciones o grupos armados no previstos por la ley), entre otros artículos.