Bakú, 3 de noviembre, AZERTAC

Las organizaciones no gubernamentales de Azerbaiyán han hecho un llamamiento al Intercambio Internacional por la Libertad de Expresión (IFEX), al Instituto Internacional de la Prensa, al Comité para la Protección de los Periodistas, a Reporteros sin Fronteras, a la Federación Internacional de Periodistas, a la Federación Europea de Periodistas, al Instituto Internacional para la Seguridad de la Prensa, a International Media Support, a Article 19 en relación con la presión ejercida sobre los medios de comunicación internacionales y los periodistas que cubren objetivamente la agresión militar de Armenia contra Azerbaiyán.

AZERTAC informa que el llamamiento reza como sigue:

"Nos gustaría informarles que entre el 27 de septiembre y el 31 de octubre de 2020, 91 civiles murieron y 404 resultaron heridos como resultado de los ataques de misiles balísticos y de racimo prohibidos de Armenia contra ciudades y regiones azerbaiyanas lejos de la zona de combate. Estos crímenes de guerra cometidos por Armenia han sido ampliamente cubiertos por los medios de comunicación mundiales.

Sin embargo, la diáspora armenia amenaza y ejerce una gran presión sobre los medios de comunicación, los periodistas y los activistas públicos que cubren la verdad sobre el conflicto entre Armenia y Azerbaiyán, difunden información objetiva e incluso demuestran una posición neutral y no responden a los intereses de Armenia y diáspora armenia. El lobby armenio amenaza de muerte, presiona e insulta a los periodistas que adoptan una posición objetiva y neutral sobre el conflicto, intentando reprimir la libertad de expresión.

Un ejemplo de ello es el informe de la Sra. Liseron Boudoul, periodista del canal francés TF1. Así, durante su visita a Azerbaiyán, la Sra. Boudoul presenció el fuego de artillería y misiles de Armenia contra nuestros civiles en Gandjá, Bardá, Tartar y otras áreas densamente pobladas, y preparó un informe objetivo al respecto.

Tras el informe, miembros del lobby armenio en Francia lanzaron un ataque total y presionaron a la Sra. Liseron Boudoul y TF1, amenazando con matar al periodista. Como resultado, TF1 se vio obligado a dejar de transmitir el informe y eliminarlo del sistema.

Carlotta Gall, corresponsal del New York Times en Estambul, fue igualmente sometida al terror moral y político por parte de los armenios. Así, la redacción del periódico y el periodista enfrentaron graves presiones y amenazas de los armenios por cubrir la masacre de la población civil de Azerbaiyán con un misil balístico por parte de Armenia.

Uno de los hechos más preocupantes y sorprendentes es el creciente número de amenazas abiertas por parte del lobby armenio al informe equilibrado sobre el conflicto entre Armenia y Azerbaiyán y la falta de reacción adecuada en el contexto de la caracterización de la caricatura del profeta de uno de los tres religiones celestiales del mundo por la revista francesa "Charlie Hebdo" como una libertad de expresión.

Estamos profundamente preocupados por el hecho de que el lobby armenio haya declarado una guerra abierta a la libertad de expresión y a los principios de objetividad, imparcialidad del periodismo.

Creemos que los intentos del lobby armenio de presionar a los medios independientes de todo el mundo deberían preocuparles, en primer lugar, como instituciones mediáticas internacionales, y deberían protestar abiertamente contra esta ilegalidad.

Como ONG que trabajan en la protección de los derechos de los periodistas y los medios de comunicación en Azerbaiyán, les instamos que protesten contra estos incidentes y eviten los intentos del lobby armenio de silenciar la libertad de expresión ".