POLÍTICA
Leyla Abdullayeva: “Los dirigentes armenios recurren a la difusión de declaraciones llenas de mentiras que no parecen convincentes”
Bakú, 26 de diciembre, AZERTAC
La vocera del Ministerio de Relaciones Exteriores de la República de Azerbaiyán, Leyla Abdullayeva, comentó la declaración del Ministerio de Relaciones Exteriores de Armenia en relación con los inverosímiles pogromos de los armenios en Najchiván.
Según AZERTAC, la declaración de Leyla Abdullaeva a este respecto reza: "Lamentablemente, hay que decir que los actuales dirigentes de Armenia, continuando la práctica de sus predecesores, a menudo recurren a la difusión de declaraciones llenas de invenciones que no parecen convincentes. Los hechos históricos atestiguan que fueron las subdivisiones armadas armenias las que iniciaron el exterminio en masa de la población pacífica de Bakú, Shamají, Gubá, Karabaj en marzo de 1918, que continuó en junio-octubre del mismo año en los distritos de Zangazur y Najchiván. Y el oficial Ereván lo sabe muy bien. Pero incluso si la parte armenia quiere olvidar a decenas de miles de azerbaiyanos pacíficos asesinados por su pertenencia étnica y religiosa, ni la historia ni los documentos de archivo lo permitirán. Para conocer la política de asesinatos deliberados en gran escala y de genocidio cometida por los armenios contra los azerbaiyanos en 1918, basta con leer las memorias de Stepan Shaumyán y la Gran Enciclopedia Soviética de 1926.
Además, quisiera señalar que, si el Ministerio de Relaciones Exteriores de Armenia desea ser secuencial en sus declaraciones, la matanza de civiles en la ciudad azerbaiyana de Joyalí, cometida por las fuerzas armadas armenias con especial crueldad, no debe callar sobre eso. No hace un siglo, sino sólo 27 años que se cometió este crimen de lesa humanidad, cuyas víctimas fueron 613 civiles, entre ellos 63 niños y 106 mujeres. Sin embargo, esto no impidió que el ex presidente de Armenia, poco después de la tragedia, hiciera una confesión de hechos frente a periodistas extranjeros: "Antes de Joyalí, los azerbaiyanos pensaban que se podía bromear, pensaban que los armenios no podían levantar la mano contra la población civil. Logramos romper este estereotipo. Esto es lo que pasó".
En general, ante el trasfondo de los desafíos de los copresidentes del Grupo de Minsk de la OSCE para preparar a la población para la paz, esa retórica del Ministerio de Asuntos Exteriores de Armenia parece tan extraña, tan contraproducente. En lugar de hacer tales declaraciones, que sólo agravan el espíritu emocional desfavorable desde el punto de vista de la solución del conflicto, el MAE armenio debería, dejando de lado el demostrativo "sufrimiento prolongado", abandonar las reivindicaciones territoriales infundadas sobre el territorio de Azerbaiyán, comenzar la desocupación y pensar en adoptar medidas concretas para resolver el conflicto y crear las condiciones para que los dos pueblos vivan juntos en una atmósfera de paz, estabilidad, seguridad y progreso".