Bakú, 3 de octubre, AZERTAC

"Es evidente que los ataques deliberados de Armenia contra zonas residenciales y civiles constituyen una grave violación del derecho internacional humanitario, incluido el Convenio de Ginebra de 1949. Los ataques contra la población civil son una táctica incorporada en el entrenamiento de combate de las fuerzas armadas de Armenia, y el genocidio de Joyalí perpetrado en febrero de 1992 ha sido un vívido testimonio de ello", dijo el presidente del Grupo Parlamentario de Todos los Partidos sobre Azerbaiyán, el diputado Bob Blackman, en su carta dirigida al presidente Ilham Aliyev, reporta AZERTAC.

"Me entristeció profundamente leer que a las 6.00 horas del 27 de septiembre de 2020 las fuerzas armadas de Armenia violaron flagrantemente el régimen de cesación del fuego y, utilizando armas de gran calibre, lanzadores de morteros y artillería, lanzaron un ataque intensivo contra las posiciones de las fuerzas armadas de Azerbaiyán.

Deseo aprovechar esta oportunidad para ofrecer mi apoyo a cualquier simpatía después de leer los informes de los militares que, según observo, están adoptando ahora las medidas contraofensivas necesarias para evitar otra agresión militar de Armenia y garantizar la seguridad de la población civil", dijo Bob Blackman.

"También quisiera expresar mi sincero pésame a los civiles que perdieron trágicamente la vida y resultaron heridos en las aldeas de Qapanli del distrito de Tartar, Chiragli y Orta Garvand del distrito de Aghdam, Alkhanli y Shukurbayli del distrito de Fuzuli y Djodjuq Mardjanli del distrito de Djabrayil, y mi horror ante las imágenes de los grandes daños que se han infligido a muchas viviendas e infraestructuras civiles.

El bombardeo de zonas e instalaciones civiles densamente pobladas situadas a lo largo de la línea del frente por las fuerzas armadas de Armenia ha sido claramente deliberado y dirigido.

He observado que las fuerzas armadas de Armenia siguen bombardeando zonas residenciales a lo largo de la línea del frente", señaló.

"Es evidente que los ataques deliberados de Armenia contra zonas residenciales y civiles constituyen una grave violación del derecho internacional humanitario, incluido el Convenio de Ginebra de 1949. Los ataques contra la población civil son una táctica incorporada en el entrenamiento de combate de las fuerzas armadas de Armenia, y el genocidio de Joyalí perpetrado en febrero de 1992 ha sido un vívido testimonio de ello", dijo el parlamentario británico.

"Según el derecho internacional, los ataques de los armenios contra las posiciones del ejército de Azerbaiyán, contra los civiles y la infraestructura civil, con el uso de armas de gran calibre, son otra agresión militar y un acto de uso de la fuerza contra Azerbaiyán", mencionó Bob Blackman.

"Observo que Azerbaiyán ha advertido repetidamente a la comunidad internacional de que Armenia se ha estado preparando para un nuevo acto de agresión y se está preparando activamente para la guerra.

Azerbaiyán ha declarado repetidamente que la actual agresión militar de Armenia contra Azerbaiyán y la presencia de las fuerzas armadas de Armenia en los territorios ocupados de Azerbaiyán han seguido siendo una importante amenaza para la paz y la seguridad regionales.

Con el debate general del 75º período de sesiones de la Asamblea General de las Naciones Unidas en curso y el mundo luchando contra la pandemia de COVID-19, los dirigentes político-militares de Armenia han recurrido a otra aventura militar y a una provocación. Al hacerlo, los líderes de Armenia demostraron una vez más un flagrante desprecio por el derecho internacional, la Carta de las Naciones Unidas y la comunidad internacional.

La responsabilidad de la situación actual y de los futuros acontecimientos recae directamente en los dirigentes político-militares de Armenia".

“Esperamos que toda la región de Nagorno-Karabaj sea devuelta a Azerbaiyán según lo acordado por la comunidad internacional y la oportunidad para que las personas desplazadas regresen a sus hogares si así lo desean y pueden hacerlo en condiciones de seguridad.

Yo y el Grupo Parlamentario de Todos los Partidos para Azerbaiyán quedamos a su disposición y continuaremos creando conciencia en el parlamento ”, enfatizó el parlamentario británico Bob Blackman.