POLÍTICA
Cancillería de Azerbaiyán emite una declaración con motivo del 35º aniversario de la catástrofe de Chernóbil
Bakú, 26 de abril, AZERTAC
El Ministerio de Asuntos Exteriores de Azerbaiyán ha emitido una declaración con motivo del 35º Día Internacional del Recuerdo de la Catástrofe de Chernóbil.
Según AZERTAC, la declaración dice:
"Con motivo del 35º Día Internacional del Recuerdo de la Catástrofe de Chernóbil, expresamos nuestra solidaridad con los países y todas las personas afectadas por esta tragedia.
El accidente nuclear de Chernóbil, cerca de Prípiat, en el norte de Ucrania, en 1986, fue una tragedia humanitaria de enorme magnitud. La explosión liberó grandes cantidades de materiales radiactivos a la atmósfera, causando una contaminación de diversos grados en Ucrania, Bielorrusia y Rusia. Fue uno de los accidentes nucleares más graves, que expuso a varios cientos de miles de personas a altos niveles de radiación y obligó a unos 350.000 a abandonar sus hogares de las zonas contaminadas. Treinta y una personas perecieron inmediatamente, y entre 4.000 y 27.000 personas murieron como consecuencia de la exposición a la radiación. Muchas personas que vivían a cientos de kilómetros del lugar de la explosión enfermaron por la radiación tras la catástrofe.
Azerbaiyán y algunos otros países participaron activamente en la mitigación de las consecuencias del accidente enviando inmediatamente a la zona más de 7.000 rescatistas y otro personal. Azerbaiyán acogió temporalmente a unas 7.000 personas afectadas por la calamidad y les proporcionó rehabilitación y tratamiento esenciales. Azerbaiyán pagó enormes costes humanos. En la actualidad, unas 5.000 personas sufren las consecuencias del accidente de Chernóbil en Azerbaiyán, y se calcula que unos 2.000 ciudadanos afectados por el accidente de Chernóbil han fallecido.
El accidente de Chernóbil tuvo un profundo impacto en la industria nuclear, lo que llevó a una mayor cooperación en materia de seguridad y a nuevos instrumentos legales. Lo que es más importante, centró la atención mundial en la seguridad y en la importancia de los factores humanos y organizativos para lograr estos cambios. El efecto de largo alcance de esta catástrofe ha demostrado que la seguridad de las centrales nucleares debe preocupar no sólo a los Estados en los que están ubicadas, sino también a los países cercanos que puedan verse afectados por posibles riesgos.
En este contexto, los riesgos de Metsamor (central nuclear) en Armenia deben ser abordados a fondo por la comunidad internacional. Esta central nuclear se construyó en los años 1976-1980 con una tecnología similar a la utilizada en Chernóbil y está situada en una zona sísmica activa. La fatídica combinación de tecnología anticuada y ubicación sitúa a Metsamor entre las centrales nucleares más peligrosas del mundo. A pesar de las continuas advertencias de varias organizaciones internacionales que califican la instalación de "peligro para toda la región", Armenia sigue explotando la central nuclear de Metsamor más allá de su vida útil.
En 2020, la Unión Europea volvió a instar a Armenia a cerrar la planta, dijo que la planta "no podía ser mejorada para cumplir plenamente con las normas de seguridad nuclear internacionalmente aceptadas, y por lo tanto requiere un cierre temprano y un desmantelamiento seguro."
El uso de tecnología obsoleta y el incumplimiento de las instrucciones de seguridad durante el funcionamiento de Metsamor plantea graves problemas medioambientales para la región en general.
Además, los repetidos incidentes de contrabando de materiales nucleares, como el uranio altamente enriquecido, suscitan preocupaciones adicionales respecto a la adecuada protección física de la planta y sus materiales nucleares.
En este día de conmemoración, hacemos un llamamiento a todas las organizaciones internacionales pertinentes, a las instituciones de la sociedad civil activas en cuestiones de seguridad nuclear y medio ambiente, y a los países de la región para que conciencien a la opinión pública sobre la prevención de un posible desastre y movilicen sus esfuerzos para abogar por la suspensión de la central nuclear de Metsamor."