Bakú, 13 de octubre, AZERTAC

El 7 de octubre, el presidente de la República de Azerbaiyán, Ilham Aliyev, concedió una entrevista al diario italiano “La Repubblica”. AZERTAC el texto completo de la entrevista.

Corresponsal al saludar al Sr.Presidente preguntó:”Quisiera empezar con el conflicto con Armenia. ¿Está satisfecho con la mediación de Rusia para el mantenimiento de la paz?

Sí, en general, estamos satisfechos con él. La guerra ha terminado desde hace casi un año, y las fuerzas de paz rusas están desplegadas en Azerbaiyán, en nuestra región de Karabaj. La situación es estable durante este período, con la excepción de algunos incidentes menores, y en general estamos satisfechos con eso. Por supuesto, quedan algunos problemas por resolver. En particular, está la cuestión de los extranjeros que deben obtener permiso de Azerbaiyán para visitar nuestros territorios, que actualmente están bajo la responsabilidad de las fuerzas de paz rusas. Aunque el número de así llamados “turistas” que visitan Karabaj ha disminuido drásticamente, algunos extranjeros todavía ingresan ilegalmente a nuestro territorio, donde se encuentran las fuerzas de paz rusas. Este problema se ha señalado a la atención de las autoridades rusas, el Ministerio de Defensa, para ponerle fin. Éstos y algunos otros problemas deben abordarse. Pero ahora estamos generalmente satisfechos con su trabajo.

- Está claro. ¿Bakú invertirá en territorios liberados?

- Ya estamos invirtiendo. Se ha adoptado un programa especial de inversiones para los territorios liberados. La cantidad proyectada para el año en curso es de aproximadamente $ 1.3 mil millones. La inversión está principalmente en proyectos de infraestructura. Para fines de este año se completará el suministro de energía eléctrica a las áreas liberadas con un área de 10,000 kilómetros cuadrados.

Actualmente estamos construyendo carreteras y ferrocarriles. Un nuevo aeropuerto, en las áreas liberadas, en Fuzuli está listo. Ya recibió los primeros aviones. Lo construimos en ocho meses. Está en marcha la construcción de dos aeropuertos más. Al mismo tiempo, ya hemos iniciado proyectos de construcción de edificios residenciales. Se aprobaron los planes maestros de las dos ciudades y se inició el trabajo. Es decir, hemos empezado a trabajar de forma muy activa y nuestro plan es devolver a los ex desplazados internos a sus hogares lo antes posible.

- ¿Está previsto involucrar a Italia en el trabajo de reconstrucción o Italia ya está involucrado en este trabajo?

- Italia es uno de los primeros países involucrados en este trabajo. El primer país es Turquía, el segundo es Italia. Esto no es ocasional. Fue nuestra elección. Dije que invitaremos solo a empresas de países amigos a los proyectos de reconstrucción del Gran Retorno. Varias empresas italianas ya están involucradas en varios proyectos, incluida la creación de museos de la victoria, museos conmemorativos y museos de ocupación. Una empresa italiana ya ha firmado un contrato con nosotros para suministrar energía a una región. Además, otra empresa italiana ha comenzado a invertir en producción agrícola. Por lo tanto, las actividades de las empresas italianas en Azerbaiyán son bienvenidas y habrá más empresas italianas en esta reconstrucción.

-Como saben, ha habido un aumento significativo del precio del gas en Europa. El gasoducto transadriático podría contribuir a mantener los precios relativamente bajos. ¿Qué nuevas oportunidades hay en relación con este oleoducto?

-Nos centramos principalmente en la finalización del gasoducto transadriático, que es el último segmento del corredor de gas del sur. El último día del año pasado, el 31 de diciembre, empezó a fluir el primer gas hacia Europa e Italia ya ha empezado a recibir gas de Azerbaiyán. Como saben, el Corredor de Gas del Sur suministrará al mercado italiano 8.000 millones de metros cúbicos de gas o incluso más. Es decir, este trabajo ya se ha completado. Ahora tenemos que mirar al futuro, porque hemos descubierto nuevos yacimientos de gas. Además, tenemos previsto producir más gas de los yacimientos existentes. También estamos realizando importantes inversiones en energías renovables junto con inversores extranjeros.

-Hablemos de Afganistán. ¿Tiene previsto reconocer al gobierno talibán?

-Actualmente no estamos en una fase en la que se pueda dar ningún paso. Azerbaiyán no está situado geográficamente cerca de Afganistán. Creo que, en primer lugar, esta decisión debería ser tomada por los vecinos de Afganistán. Nunca hemos estado estrechamente relacionados con Afganistán en el plano político, económico o de transporte. Nuestra presencia en Afganistán se limitó a la participación en operaciones de mantenimiento de la paz en ese país. Por cierto, los militares azerbaiyanos fueron de los últimos en abandonar el aeropuerto de Kabul. Nuestros militares salieron del aeropuerto un día antes de la explosión allí. Así, cumplimos nuestra misión con dignidad y máxima eficacia hasta el último día. Afganistán se encuentra ahora en pleno proceso de formación de un nuevo gobierno y de determinación de las prioridades en materia de política exterior. Si vemos tendencias positivas, un enfoque positivo y signos de cooperación potencial, entonces, por supuesto, daremos una respuesta adecuada. La independencia es el principio más importante de la política exterior de Azerbaiyán. Nuestra política exterior está absolutamente libre de cualquier dictado externo. En segundo lugar, el pragmatismo. Esta es la base sobre la que formamos nuestra postura.

-¿Puede considerarse un hecho positivo la mayor implicación europea en el Cáucaso Sur?

-Estas cuestiones están siendo ampliamente debatidas. Durante la visita del Presidente del Consejo de la Unión Europea, el Sr. Charles Michel, a Azerbaiyán este verano, mantuvimos extensas conversaciones sobre un amplio programa de cooperación entre Azerbaiyán y la Unión Europea. Por supuesto, hay áreas tradicionales de nuestra cooperación como la energía, y aquí sólo podemos acoger la realización de grandes proyectos.

En la actualidad, la Unión Europea muestra un gran interés por nuestro potencial de transporte y participa activamente en él porque estamos convirtiendo a Azerbaiyán en un importante centro de transporte en Eurasia, con infraestructuras modernas y vías de comunicación diversificadas con sus vecinos. La Unión Europea tiene previsto participar en este proceso. También estamos debatiendo el papel de la Unión Europea en el desarrollo de la posguerra en el Cáucaso Sur.

-¿Que está pasando en relación a Irán?

-¿En general? ¿O se refiere a nuestras relaciones bilaterales?

-Sí. Hay ciertas preocupaciones, ciertos problemas. ¿Qué piensa hacer al respecto? Según tengo entendido, no están muy contentos con su proximidad con Israel. ¿No es así?

-Es un pretexto. La razón por la que esto ocurre no es por nuestras relaciones con otros países, porque nuestra política es muy abierta, transparente, estable y, como he dicho antes, independiente. Ningún otro país puede o debe intentar influir en las decisiones de Azerbaiyán. Las decisiones las tomo yo aquí en Bakú según los intereses nacionales de Azerbaiyán. Si alguien intenta utilizar pretextos artificiales y acusar a Azerbaiyán en sus relaciones con otro país, esos intentos se fracasarán. Esta es la manera equivocada y nos llevará a un callejón sin salida.

La razón de lo que pasó es muy sencilla. Azerbaiyán quiere que sus fronteras sean tratadas con respeto. Después de la liberación de Karabaj, nosotros devolvimos nuestra frontera con Armenia. Llegamos a nuestra frontera y nos alojamos allí. La carretera entre algunas ciudades armenias pasa por el territorio de Azerbaiyán. Empezamos a observar que esta carretera se utilizaba para el transporte ilegal de mercancías a Karabaj y nuestro territorio. Esto es inaceptable. Exigimos que se respeten nuestras fronteras. No cruzamos ilegalmente las fronteras de ningún otro país. Así que nuestro mensaje fue muy simple: ¡Basta! Hicimos una declaración muy amistosa sin al público para detenerlo. Porque esto no es cierto. Controlamos esos caminos y vemos que no tiene sentido engañar y decir que "esto no sucedió". Desafortunadamente, esta advertencia no fue respondida adecuadamente.

Las razones de lo ocurrido, es muy simple. Azerbaiyán quiere que se respeten sus fronteras. Después de la liberación de Karabaj, llegamos a nuestras fronteras con Armenia. Por lo tanto, llegamos a nuestras fronteras, y nos sentamos en nuestras fronteras. Y sucedió que la carretera entre algunas ciudades armenias atraviesa el territorio azerbaiyano. Pero entonces empezamos a ver que esta carretera se utiliza para el transporte ilegal de mercancías a Karabaj, a nuestro territorio. Esto no es aceptable. Exigimos que se respeten nuestras fronteras. No violamos ilegalmente las fronteras de ningún otro país. Por lo tanto, nuestro mensaje fue muy sencillo: basta. Hicimos una comunicación muy amistosa, no una comunicación pública, sino una comunicación amistosa para detenerlo, porque no es correcto. Nosotros controlamos esa carretera. Lo vemos. No hay manera de engañar, no hay manera de decir que no sucede. Lamentablemente, esta advertencia no fue respondida adecuadamente, entonces, tuvimos que dar el segundo paso. Hicimos una nota diplomática. Invitamos al embajador y lo hicimos público, para detenerlo. Pero en realidad se agravó aún más. El número de camiones procedentes de Irán hacia Karabaj aumentó y lo consideramos como un asalto, como una falta de respeto deliberada. Así que tomamos otras medidas que son absolutamente legítimas. Se crearon grandes turbulencias y movimientos innecesarios en el país vecino: declaraciones inapropiadas, amenazas, entrenamientos militares en nuestra frontera. Porque fue extraño que primero se dijera que estos entrenamientos militares están planeados, pero luego se dijo que eran para demostrarnos algo. Nadie puede imponernos su voluntad. Queremos tener relaciones amistosas con todos los países, en primer lugar, con nuestros vecinos. En muchas ocasiones, yo, hablando de las prioridades de la política exterior de Azerbaiyán, y todas están publicadas, dije que nuestra prioridad son las relaciones con los países vecinos. Nosotros, con Irán y durante el anterior gobierno iraní con el que trabajamos durante ocho años, conseguimos elevar nuestras relaciones al nivel más alto posible. Tuve más de diez reuniones con mi homólogo Hassan Rouhani. Todas ellas fueron productivas. Firmamos muchos acuerdos y los aplicamos en materia de energía, transporte, desarrollo cultural y seguridad. Nuestras relaciones fueron realmente el símbolo de la amistad y la buena vecindad. Cuando el nuevo gobierno de Irán, el nuevo presidente fue elegido, ¿qué hemos hecho? Enviamos una gran delegación a su toma de posesión, encabezada por la jefa de nuestro parlamento y el viceprimer ministro. Ellos entregaron mi mensaje de amistad al presidente iraní directamente. Al mismo tiempo, y el otro mensaje que se entregó particularmente lo que dije antes "por favor, preste atención a esta actividad comercial ilegal en Karabaj por los empresarios iraníes". No estábamos en posición de acusar al gobierno iraní. Entendimos que son algunas empresas privadas las que lo hacen. Pero pedimos que lo dejaran. Lo que sucedió a cambio, todo el mundo lo ve. Y lo que tenemos al final. De nuevo, nada bueno. Por lo tanto, en primer lugar, rechazamos todas las acusaciones sobre que Azerbaiyán lleva a Israel a los territorios liberados. Eso es una absoluta tontería. No es más que un pretexto dirigido al público nacional para demonizar a Azerbaiyán. Todo el mundo puede ir y ver que allí no hay vida. Todo está destruido. En segundo lugar, que exigimos que se nos respete, el mismo respeto que mostramos a los demás.

-Muchas gracias. Sólo la última pregunta. Lo siento, pero no puedo evitar preguntarle sobre “los papeles de Pandora”. Como sabe, su nombre ha aparecido. Entonces, ¿cuál es su defensa? ¿Qué diría Ud para defenderse en relación a los “papeles de Pandora”.

-Sabe, este tipo de cosas me acompañan desde hace muchos años. De vez en cuando, en función de una conjetura política, algunas fuerzas en Occidente tratan de utilizar este tipo de calumnias para desacreditar la imagen de Azerbaiyán y socavar la posición de este país. Está claro que no se trata de una especie de investigación periodística. Está claro quién está detrás, y está claro por qué Azerbaiyán apareció allí. No sé sobre los demás, tal vez también hicieron algo que a algunas fuerzas de Occidente no les gusta. Pero con respecto a Azerbaiyán, por supuesto la victoria en la segunda guerra de Karabaj fue una sorpresa para muchos. Y eso no les gustó. Querían que Azerbaiyán fuera débil, dependiente, ocupado, que siempre pidiera ayuda para resolver el conflicto. Y ahora, cuando Azerbaiyán lo hizo por sí mismo, cuando Azerbaiyán derrotó a Armenia, también los círculos de Occidente que están estrechamente vinculados a Armenia se enfadaron mucho. Nos lo esperábamos. En realidad, decíamos que se planea una nueva campaña de calumnias contra Azerbaiyán. Entrando en materia, me gustaría decir que soy presidente desde hace 18 años. Antes de eso, fui un hombre de negocios. Mi biografía es conocida: un empresario de éxito. Cuando me convertí en presidente, no era un hombre pobre. Cuando me convertí en presidente, dejé de estar directamente involucrado en el negocio, y transferí mi negocio a mi familia. Probablemente me entenderán, a diferencia de otras personas en Occidente que entregan toda su riqueza a sus gatos y perros, en Italia y Azerbaiyán valoramos los valores familiares. Por lo tanto, transferí todo mi negocio a mis hijos. Ellos se esforzaron y continuaron con sus negocios. Tienen inversiones principalmente en Azerbaiyán. Tienen inversiones fuera de Azerbaiyán. Toda su actividad empresarial es transparente, está auditada internacionalmente y no hay nada que nadie pueda afirmar que algo aquí no está correcto.

Lo que se escribió en los periódicos, francamente hablando, no lo leí. Me informaron, y tal vez el 5% es verdad. El resto es exageración. Pero, de nuevo, tengo el legítimo derecho de decir abiertamente sobre eso. No es un secreto en Azerbaiyán que mis allegados, los miembros de mi familia, están involucrados en negocios, en obras de caridad, en muchas cosas que están sucediendo ahora en Karabaj. Por ejemplo, la Fundación que creé está invirtiendo ahora en la restauración de Karabaj, en todas las mezquitas de Aghdam, Shusha, Zangilan se están financiando con el dinero de la Fundación. Hemos financiado la construcción de casas para los refugiados para, creo, 5.000 familias. Lo que hemos hecho. Hacemos mucho en Azerbaiyán. Por supuesto, a algunas personas no les gusta en Occidente. Quieren acusarnos, quieren subordinarnos, quieren imponernos su voluntad. Y yo digo: ¡No! Defenderé a Azerbaiyán, su soberanía, su independencia, su voluntad hasta el final de mi vida. Y todo este tipo de historias sucias no significan nada para mí y para el pueblo de Azerbaiyán.

-Señor Presidente, le agradezco mucho. Espero verle algún día en Bakú.