MUNDO
En Brasil denuncian un incremento de la violencia contra indígenas
Bakú, 1 de octubre, AZERTAC
El Consejo Indigenista Misionero (Cimi) rechazó la “realidad extremadamente perversa y preocupante del Brasil indígena en el primer año del Gobierno de Jair Bolsonaro”, reporta AZERTAC alegándose a Agencia Anadolu.
"La intensificación de las expropiaciones de tierras indígenas, forjada en la invasión, acaparamiento y subdivisión de tierras, se está consolidando rápida y agresivamente en todo el territorio nacional, provocando una destrucción inestimable", aseguró el Informe Violencia contra los Pueblos Indígenas de Brasil realizado por el Cimi.
Según los datos recogidos por el Cimi en 2019, los pueblos y territorios tradicionales indígenas están siendo “usurpados explícitamente”. El documento destacó que las quejas de violencia contra los indígenas brasileños pasaron de 110, en 2018, a 276, en 2019.
“Las tierras indígenas están siendo invadidas de manera ostensible y se están extendiendo de norte a sur. En algunas situaciones (…) los propios invasores mencionan el nombre del presidente (Jair Bolsonaro), confirmando que sus acciones criminales son alentadas por quienes deben cumplir con la obligación constitucional de proteger los territorios indígenas, patrimonio del país”, subrayó el documento.
En cuanto a los tres tipos de “violencia contra el patrimonio” descritos en el informe se registraron los siguientes datos: “Omisión y retraso en la regularización de los niveles (829 casos); conflictos relacionados con los derechos territoriales (35 casos); e invasiones posesivas, explotación ilegal de bienes naturales y diversos daños al patrimonio (256 casos registrados); denunciando un total de 1.120 casos de violencia contra el patrimonio de los pueblos indígenas en 2019”.
Cabe destacar que, de las 1.298 tierras indígenas en Brasil, 829 (63%) presentan algún tipo de pendiente por parte del Estado para la conclusión del proceso administrativo de demarcación y registro como territorio indígena tradicional en la Secretaría de Patrimonio de la Unión (SPU), concluyó el texto del Cimi.