ECONOMÍA
Victoria de Azerbaiyán en la guerra de Karabaj garantizará la seguridad de los proyectos energéticos regionales
Bakú, 13 de noviembre, AZERTAC
La victoria de Azerbaiyán en la guerra de Karabaj y la capitulación militar de Armenia, que ha dado lugar a la liberación de todos los territorios de la ocupación, garantizarán la seguridad y la fiabilidad de los proyectos energéticos regionales y mundiales, señaló el 12 de noviembre el Ministro de Energía, Parviz Shahbazov.
Al dirigirse a la 22ª Reunión Ministerial del Foro de Países Exportadores de Gas, el ministro se refirió a las amenazas que plantea Armenia a los proyectos energéticos de Europa.
Subrayó que Armenia bombardeó los puntos situados precisamente sobre los corredores de energía de Azerbaiyán a Europa.
Shahbazov destacó que Armenia había intentado atacar el oleoducto Bakú-Tiflis-Ceyhan, el oleoducto del Cáucaso meridional, el oleoducto de exportación occidental, el oleoducto Bakú-Novorossiysk, que es un importante vínculo energético entre Azerbaiyán y Rusia, y las mayores centrales térmicas e hidroeléctricas de Azerbaiyán. Además, recalcó que altos funcionarios armenios también han declarado su intención de destruir la terminal de petróleo y gas de Sangachal.
Además, el ministro enfatizó que todos estos actos de intención destructiva y vandalismo intencionado han demostrado que la estabilidad en el mercado mundial de la energía y el gas requiere un entorno geopolítico libre de conflictos.
"La capitulación militar de Armenia, que dará lugar a la liberación de nuestros territorios de la ocupación, también garantizará la seguridad y la fiabilidad de nuestros proyectos energéticos regionales y mundiales", declaró el ministro.
Los enfrentamientos entre Armenia y Azerbaiyán se reanudaron después de que Armenia lanzara ataques a gran escala contra las fuerzas y los civiles azerbaiyanos el 27 de septiembre.
El 4 de octubre, Armenia lanzó un ataque con misiles contra la ciudad de Mingachevir que alberga una central hidroeléctrica. El 6 de octubre, Armenia disparó un misil de racimo prohibido contra el oleoducto Bakú-Tiflis-Ceyhan (BTC), lo que provocó una situación peligrosa en torno al oleoducto del Cáucaso meridional y el oleoducto de exportación occidental. La bomba cayó a 10 metros del oleoducto. Más de 300 bombas de racimo fueron expulsadas alrededor como resultado del ataque. Además, Armenia atacó el oleoducto Bakú-Novorossiysk y el acueducto Oghuz-Gabala-Bakú.
Los 44 días de guerra terminaron con el acuerdo de paz negociado por Rusia, firmado el 9 de noviembre por los líderes de Azerbaiyán, Rusia y Armenia. El acuerdo de paz entró en vigor el 10 de noviembre y prevé la desocupación de los distritos azerbaiyanas de Kalbadjar, Aghdam y Lachin para el 1 de diciembre, así como el regreso de los desplazados internos azerbaiyanos a Karabaj y a las siete distritos adyacentes bajo el control del Alto Comisionado de las Naciones Unidas para los Refugiados.